Mi experiencia en Arthouse Holland fue bastante gratificante, porque disfrute mucho el estar en contacto con la naturaleza y los paisajes que rodean la residencia. Las plantas, aves, flores, el canal, el paseo en bicicleta, entre otras,... finalmente ahora que me encuentro en otro lugar, puedo recordarlo todo como: una mágica experiencia.

Al mismo tiempo compartir la estancia y formar nuevas amistades; creaban un ambiente que inspiraba de muchas formas mi proyecto y que ahora son parte de mi historia. La forma que tomó la selección de ideas y los colores, hasta nuevos proyectos que nacieron allí y que ahora empiezan en otro momento y espacio. Ahora me convenzo más de que: el compartir experiencias, tiene que formar parte de nuestra historia para crecer como personas y esto ayuda a desenvolvernos mejor en nuestro campo de trabajo. Sin dudarlo volvería a “Art House Holland” para seguir intercambiando ideas, aprender de nuevas áreas, disfrutar del arte, la compañía y de la naturaleza.

Arthouse Holland es un espacio a menos de 10 minutos en bicicleta de la ciudad de Leiden, he tenido la oportunidad de alojarme en la residencia en la que Manon y Santi tienen un excelente taller en el que desarrollar proyectos artísticos y en el que he podido compartir largas horas de trabajo junto a otros compañeros. Desde el primer día, los anfitriones me han hecho sentir como si estuviera en mi propia casa y han hecho todo lo posible para que así fuera con todos y cada uno de los que hemos estado allí. La habitación que tenía asignada era amplia y muy cómoda, al igual que las zonas comunes o el taller, éste último con todo lo necesario para trabajar y con Santi en todo momento dispuesto para ayudarte en lo que necesites. Como decía al principio, desde el primer día la estancia es y te la hacen muy agradable e incluso te organizan un recorrido turístico por Leiden, donde te explican donde poder encontrar materiales para tu trabajo, además de resolver cualquier duda que puedas tener en relación a trenes, horarios y desplazamientos a otros pueblos y ciudades de Holanda. La residencia está ubicada en un precioso espacio natural desde el que te puedes desplazar en bici no sólo a Leiden, sino también a todos los pueblos de los alrededores a los que hacer pequeñas excursiones y conocer un poco más de su cultura, de sus costumbres,…, e incluso a la playa si tienes las ganas de hacer una excursión un poco más larga (que merece la pena) y darte un baño o simplemente ver el paisaje. Sinceramente, para mí ha sido una experiencia muy positiva que espero volver a repetir y que aconsejo a todos aquellos que queráis vivir algo similar, tanto por el resultado del proyecto, como por sitio y por supuesto por los anfitriones que me llevo como amigos, a los que mando un abrazo desde aquí.

Casi que no tengo palabras para expresar mi agradecimiento en todos los sentidos a Arthouse Holland. Indudablemente ha sido una experiencia única, gratificante y muy productiva ya que ahí han nacido nuevos proyectos con los que estoy muy motivada.

Desde que me bajé del avión hasta el final de mi estancia todo ha sido una suma de experiencias enriquecedoras tanto a nivel artístico como personal ya que me llevo grandes amigos (Manon , Santi, Sari y Jaime). Ellos han sido el ingrediente perfecto para que este periodo fuera aún mejor de lo esperado. Me llevo de cada uno mucho aprendizaje.

De Manon y Santiago los gestores de este precioso proyecto sólo puedo decir cosas bonitas. Ellos me han hecho sentir como en casa ya que en todo momento estaban pendientes de que estuviésemos cómodos y nos daban muchas facilidades para avanzar en nuestros proyectos artísticos. Además tengo que destacar que gracias a ellos hemos conocido Holanda como auténticos holandeses ya que nos llevaban a lugares típicos que ellos conocían bien.

La residencia espaciosa, luminosa y cuidada al detalle está situada en un enclave bucólico, rodeada de auténtica paz y naturaleza que propiciaba la inspiración y las ganas de crear. La casa está muy bien comunicada con el centro de Leiden (preciosa ciudad llena de canales y armonía) a la que iba prácticamente a diario a avanzar sobre mi proyecto. También está cerca de la estación de tren que conecta con ciudades importantes como: La Haya, Amsterdam y Amberes entre otras.

Arthouse Holland es una experiencia altamente recomendable de la que he tenido la enorme suerte de ser parte. En mi memoria queda y echaré mucho de menos tantos buenos ratos que allí he pasado.

Mi residencia en Arthouse Holland exedió todas mis expectativas.

La atmósfera en la que viví fue cálida. Manon y Santiago son grandes anfitriones. Nos abrieron la puerta de su casa para vivir con ellos. Se vive en un espacio muy limpio y acogedor. Es difícil encontrarse sólo en las casa, siempre hay alguien. Pero si te gusta la privacidad y el silencio, como a mi, esta la habitación, el estudio o los múltiples espacios que Leiden tiene para ofrecer.Si te gusta la cocina, tanto como a mi, podrás gozar de los talentos culinarios de Santiago. ¡Es un artista!

El espacio de trabajo es enorme. Yo fui feliz porque me gusta trabajar formatos grandes, y en el taller pude “apropiarme” de un espacio generoso que me permitió hacer una pieza grande, la más grande que ha hecho hasta ahora. De hecho, tengo mucho interés de regresar y hacer una obra… ¡descomunal!

Si te gustan los espacios bastos, Leiden tiene mucho que ofrecer. Si te gusta deporte vete preparando, porque justo afuero de “la granja” hay una buena extensión de calle para correr o andar en bicicleta, también hay un gimnasio cerca.

Manon y Santiago son grandes anfitriones y siempre están dispuestos ayudarte en todo los que necesitas. Leiden, y el espacio que Arthouse Holland ofrece son ideales para que las “experiencias estéticas” se manifiesten. La paz y la tranquilidad que se vive evoca y motiva a la introspección y al contacto “con uno mismo”, en mi opinión, necesario para el desarrollo de todo artista.

Por otro lado, Santiago además de ser un gran anfitrión, es un gran artista, un maestro del grabado, de la serigrafía y la carpintería, entre muchas otras habilidades. Siempre tuvo la disposición de ensenarnos lo de que le ha tomado toda una carrera aprender, cosa que no es común, entre artistas. Siempre dispuesto en compartir todo aquello que lo ha llevado a gozar el prestigio y al reconocimiento del que tiene. Más allá de todo lo que ha forjado a lo largo de su trayectoria. Este proyecto Arthouse Holland en mi opinión es un su obra maestra.

Arthouse Holland, marcó para siempre un punto en mi desarrollo personal y profesional. Donde pude consagrarme como artista de apropiación. Aunque mi periodo de residencia fue corto las amistades y los lazos forme, estoy seguro, son lazos de por vida.

De nuevo, ¡Gracias Manon!, ¡Gracias Santiago!

En el verano de 2017 pasé un mes trabajando en Arthouse Holland. El silencio, la naturaleza y los estudios, además de la asistencia de Manon y Santiago, crearon las condiciones ideales para poder trabajar a gusto y de forma fluida. A todo esto se le añade la compañía de otros artistas y actividades organizados, como visitas a museos y población de Holanda. Es una experiencia enriquecedora, que recomiendo totalmente.